viernes, 30 de diciembre de 2011

Aterrizamos en Sao Paulo, donde se quedó mi jefe con la auxiliar de abordo, que era su amante y solía asistirlo en los viajes que hacía por negocios, una empleada apta para todo servicio.


Estabamos en la oficina de operaciones haciendo el plan de vuelo para volver a Rio con el segundo de a bordo cuando me llama aparte una de las secretarias. 
- Comandante ya que ud. va a Río no puede  hacerme el favor de llevar a una prima. No soy de pedir favores porque se que es demasiada responsabilidad para uds. Yo le pagaría el pasaje, a mi prima la asaltaron y se quedó con la ropa puesta.
- No tengo ningún problema y no le voy a cobrar nada, este viaje ya esta pago.
-Mil gracias comandante le debo una.
Le comuniqué la novedad a Steve, asintió de hombros, era una persona casi antisocial y de muy pocas palabras, lo necesario para cumplir con los check in a bordo.
 Apareció por un corredor  una morena salida de una revista de hombres: alta 1,78, pelo negro  largo hasta la espalda. Ojos negros en los cuales no se distinguían  las pupilas, espalda amplia y al igual que los brazos muy torneados, sus pechos cubiertos por un diminuto top amarillo  hacían que sobresalieran por arriba y por abajo quedando sus pezones cubiertos por una especie de antifaz ciego. Un mini vestido plisado que se levantaba por la parte posterior por el volumen de dos glúteos, voluminosos y de una forma exquisita.
-Hola comandante mi nombre es Tamara, gracias por este favor, me asaltaron y me quitaron todo el equipaje.
-No hay problema Tamara mi nombre es Xavier, Lo único que tengo que decirte es que primero vamos a Belo Horizonte y luego recién a Rio, es decir son casi 1000 kilómetros , mas o menos una hora y media cuarenta y cinco.
- Xavier, no tengo problema lo único que me interesa es llegar a mi casa.


Nos encontrábamos a 30.000 pies en la mitad de la distancia a Belo Horizonte,  buen tiempo para volar, conectado el piloto automático y a 20 minutos del siguiente control radial. Me levanté y le digo a  Steven
   -  toma el mando voy al baño, a buscar algo de comer y ofrecerle algo a nuestra pasajera. Me miró como sabiendo mi verdadera intención,  hizo una mueca de asentimiento y me levanté abriendo la puerta de la cabina. 
- Hola ¿que tal el vuelo Tamara?.
Estaba sentada en uno de los butacones con las piernas recogidas, sin zapatos leyendo una revista.
- Este avión es fantástico es de lujo, que comodidades que tiene.
Mis ojos estaban recorriendo sus largas piernas mirándole la entrepierna en la que no se observaba ningún color de braguillas. Nos miramos a los ojos y lejos de incomodarse, no cambió la postura me dijo:
- ¿este tapizado es de cuero verdadero?
- Si, es cuero no se si de gacela o ñu, pero tiene la propiedad de aparentar ser una piel humana de lo suave que es. Tamara quieres beber algo, también se que el catering coloca unos bocadillos.
- Si por favor me apetecería una cerveza y un bocadillo.
Destapé la cerveza la serví en una copa, cogí un bocadillo caliente, en un sobre de aluminio, las puse  en una bandeja y al agarrar los sobres de condimentos un sobrecito de salsa de tomate reventó manchándome los dedos.  Ya tenía la bandeja con la otra mano y le digo, 
-Tamara por favor alcánzame una servilleta que tengo los dedos manchados. Tamara tomó la bandeja la apoyó en asiento de al lado y me tomó la mano lamiendo la salsa, chupándome los dedos, al tiempo que clavaba su negra mirada en mis ojos, entreabría sus piernas sin nada debajo y me decía: - Una fantasía de siempre fue hacerlo en un avión y veo que se está por cumplir.
- Tamara siempre fue la mía pero no puedo, estoy piloteando esta nave y no puedo dejar al segundo demasiado tiempo solo; y ya debemos estar cerca de descender en Belo horizonte, pero te prometo que ni bien pueda, vendré y jugaremos un poco.
Se levantó me estampó un beso con gusto a salsa de tomate mientras que me agarraba por encima del pantalón....sí ya lo creo que vamos a jugar. Se bajó el top poniendo mis manos en cada una de sus tetas que no me cabían en la mano. Devolví el beso, tomé una bandeja con una bebida cola y entré en la cabina. toma Steven  te traje algo para comer. Me miró misteriosamente y se dedicó a cambiar en el navegador el posicionamiento de la aeronave para efectuar el giro  que nos depositaría en Belo Horizonte.


Aterrizamos y lo mande a la terminal aérea   a entregar los documentos que esperaba un personal de la empresa Y hacer el plan de vuelo. Debíamos esperar que operaciones nos enviara un vehículo para llevarlo y traerlo, y mientras hacía reposición de combustible. A los 20 minutos seguía esperando el vehículo y ya estaban terminando la reposición de combustible. Por fin llegó el móvil, el conductor bajó y avisó que lo llevaba y debía esperarlo porque habían 2 tripulaciones demoradas a las cuales debía llevar a la terminal.


Por fin se fueron... Me levanté y le saqué el top por arriba de la cabeza, mientras ella aflojaba el botón de su vestido que caía a sus pies. Acariciarla era similar a tocar una escultura, todos los músculos marcados y tónicos, las nalgas un banquete para los cinco sentidos, se arrodilló tomando mi pene en su boca y comenzó a mamarlo ora en la punta, ora en el fondo, jugaba con la lengua lamiendo la base del glande. Se sacó la polla de la boca y me miró y me dijo.
Tengo que decirte algo Xavi. mis padres eran muy pobres y vendieron mi virginidad cuando tenía trece años a un hombre con mucho dinero que tiene mas de sesenta años. Cada dos meses tengo que ir a un ginecólogo que constata mi estado, tengo 19 y a fin de año se cumple el plazo, me gusta el sexo pero no puedo follar por la vagina, te hago lo que tu quieras  y te doy lo que me pidas, pero no puedes penetrarme ni con los dedos.


Me senté con los pantalones bajos en un butacón y recliné el de adelante hacia el frente, la hice apoyar en el butacón reclinado, colocó sus pies a los lados de mis piernas, por lo cual tenía su trasero en frente de mi cara, con el dedo pulgar de la mano derecha le acariciaba el clítoris mientras que mi lengua iba desde su ano hasta su clítoris como un pincel, por momentos mas suave, otras aumentando la presión, entreabría los labios sólo para pasarle la lengua de plano. Le comencé a pasar la lengua por su ano en forma circular, introduciendo la punta de mi lengua y jugando con ella, le chupaba para volver a meter la lengua, humedeciendo y dilatando, luego ella se introdujo dos dedos al tiempo que humedecía la punta de mi polla. Fue bajando lentamente hasta empalarse por completo, nos movíamos como salvajes, ella inclinada y yo sobre su espalda tomando con ambas manos sus nalgas subiendo y bajando para dirigirle los movimientos y mientras ella se acariciaba.
-Tirate para atrás,me pidió; Recliné parcialmente la butaca, se recostó sobre mi pecho y levanto las piernas hacia  adelante, apretando con fuerza con su mano en el medio, hasta correrse suavemente, al principio, hasta que gritó salvajemente  moviendose lateralmente  hasta quedar exhausta. Lentamente se levantó, humedeció  una servilleta  con cerveza limpió  mi polla y la puso entre sus tetas, masturbándome con las dos simultaneamente o con un movimiento de vaiven entre una y otra. Empecé a gemir, me voy a correr, le dije, y en ese momento puso la boca en mi glande y comenzó a succionar y lamer mientras subía y bajaba las tetas en mi polla completamente cubierta... me vacié a borbotones sintiendo que los riñones se me iban por el conducto, me miró mientras se relamía tragándose todo... quedé desencajado, Tamara cogió su ropa se fué al baño mientras que yo intentaba recomponer la mía. 
Bajamos en Rio y cuando nos dirigíamos a la terminal puso en mi mano un papel que guardé en mi bolsillo. Me ofrecí a llevarla pero me dijo que su hermano la esperaba, nos dimos un casto beso de despedida.
Mientras me acomodaba en el coche que me llevaría a mi casa saqué el papel y decía.
"Xavi, gracias por traerme y hacer realidad mi fantasía, me gusto el sexo contigo.¡ Que tienes que hacer el primero de año que ya no seré mas virgen,? llámame este es mi movil........"

lunes, 26 de diciembre de 2011


Ese 22 de diciembre  aterrizamos en Moscú cerca de las cuatro y media de la tarde. Teníamos que pasar la noche para retornar al día siguiente, que con la escala que debíamos hacer en Paris a la media noche del 23 estábamos de vuelta. Todos los de la tripulación teníamos prisa  por volver y pasar la navidad con nuestras familias. Cuando aún no habían descendido todos los pasajeros tuvimos la mala noticia. El aeropuerto cerraba sus operaciones por temporal y  se pronosticaba un mínimo de 48 horas. Es decir que estábamos 2 tripulaciones, de la misma compañía, 28 personas varadas a la espera de la apertura del aeropuerto.
Nos trasladamos a 2 hoteles ya que la reserva que la empresa tiene  es para la tripulación entrante.
Pese al mito popular,  las tripulaciones no latinas difícilmente  generan relaciones sociales, los cambios continuos  a diferentes trayectorias hacen difícil el entablar una relación social con los sobrecargos o las auxiliares de a bordo. Con suerte con el segundo de a bordo y el mecánico podíamos tener la posibilidad de coincidir en otros vuelos.
Sólo el segundo de a bordo y yo teníamos los números de las habitaciones de la tripulación en caso que se presentara alguna novedad de urgencia.
Así que el quedar a cenar a una hora no necesariamente significa que todos estemos juntos y que nos sentemos en las mismas mesas.
Luego de una cena con muchas caras largas, me fui al bar del último piso a tomar una copa antes de irme a dormir, había poca gente a esa hora y  en la penumbra distingo a Roswitha una auxiliar de abordo alemana con la que había compartido algún trayecto transoceánico. Muy eficiente en su tarea y, por supuesto absolutamente aséptica y sólo con un trato profesional.
Me acerqué con mi copa, estaba sentada en una suerte de mesa alta y circular con sólo dos taburetes.  - Hola Roswitha ¿puedo?
-        Si comandante tome asiento.
 Hablamos de la mala suerte de tener que pasar navidad tan lejos de casa y rodeado de desconocidos, del trabajo y las horas acumuladas, de las anécdotas de otros vuelos, la botella de vodka que nos habían traído disminuía lentamente. El alcohol  la fue volviendo un tanto mas locuaz y sensible, me  contó que era madre soltera  con un hijo de dos años con el cual no iba a pasar la navidad, y en un momento le enjuague los ojos mientras silenciosamente sollozaba.  Es difícil el consuelo en esas situaciones porque arrastraba mi propia historia,  mi matrimonio no era nada mas que compartir una cama cada tanto, sin  poder compartir con mis hijos  los momentos mas importantes. No tenía lo que se dice un ánimo festivo.
Nos levantamos para dirigirnos a nuestras habitaciones 
En el ascensor ambos intentamos apretar el  diez, permanecimos en silencio hasta llegar a nuestro piso, y luego al bajar intentó sacarse los zapatos
– Son nuevos y me revientan los pies. Pero al hacerlo trastabilló viniéndose hacia delante,  pude sostenerla  con un abrazo forzado. Quedó apretada hacia mi y sentí sus lágrimas en mi mejilla – No me dejes sola esta noche por favor. Le sujete con una mano la barbilla y  le di un beso que fue el inicio de ponernos como una moto, la empujé contra la pared mientras nos comíamos las bocas. Le solté el pelo sujetando la cabeza desde la nuca con mis dos manos mientras sus cabellos se escurrían  entre mis dedos, se desprendió la camisa de su uniforme, al tiempo que sacaba del bolsillo de mi chaqueta la tarjeta. Ingresamos a los tropezones  sin desprendernos uno del otro, cayendo en la alfombra…- déjame ir al baño… se levantó y en el espacio de luz del baño … su silueta   dibujaba su cuerpo con unos senos pequeños y un trasero muy bien proporcioados. Se abalanzó sobre mí y mientras nos besábamos entremezclando nuestras lenguas, me aflojó el cinturón, desprendió el botón del pantalón y bajó el cierre.
La puse boca abajo mientras le masticaba suavemente la piel de la nuca, sintiendo que se erizaba, le besé los lóbulos de las orejas, mientras que con una de las manos le acaricié las nalgas, succioné y mordí suavemente sus orejas. Bajé por la espalda mordiendo y pasándole los labios por la columna rumbo a sus nalgas, me ocupé de los dos hoyuelos en la parte baja de la espalda, le pasé la lengua y los labios….se dio vuelta para ponerme boca arriba mientras agarraba mi polla endurecida y descendía su cabeza hasta meterla dentro de su boca, pasando la lengua por arriba y por abajo, alrededor de del capullo,  metiéndose los testículos en la boca, hasta que me dí cuenta que estaba a punto de correrme en su boca… la levanté la hice cambiar de posición y me entretuve lamiendo y sorbiendo sus pezones, mordiendo con un poco de presión hasta sentir su quejido en el límite del dolor….bajé por su coño depilado  con mis labios  tomé los suyos, mi labio inferior  pasaba lentamente por la parte baja de por su pequeña prominencia que se endurecía con las caricias, le metí la lengua luego lamí su clítoris: me sujetó  la cabeza moviendo frenéticamente su pelvis, le introduje un dedo hasta el fondo, luego le siguió otro y otro mas, le frotaba la pared superior sintiendo que comenzaba con un sonido ululante primero muy suave para después aumentar de volumen. Movía la pelvis de una manera casi violenta y comenzó a correrse en mi mano y en mi boca en un chorro continuo, era un verdadero manantial, tenía la mano y la cara empapada y seguía…-por favor seguí, seguí no te detengas no te detengas, así hijo de puta, trátame como a tu puta, ahora  follame, métela hasta el fondo…follame mas fuerte…  hazme sentir bien hasta el fondo,  rompeme el coño en dos…le mordía los pezones, me dio un empujón dejándome boca arriba y empezó una danza infernal con la pelvis  mientras se corría, mojando mi vientre y mis muslos… no te corras aún…por favor no te corras… pasó una pierna por arriba de mi cuerpo quedando con las dos piernas para el mismo lado y siguió moviendo su pelvis de manera circular y luego lateralmente… toma hijo de puta… tom…., ¡no dios otra vez!…y nos corrimos los dos,  quedamos exhaustos  acostados  tomando resuello, traspirados con un olor a sexo que colmaba el ambiente.
Desperté excitado, estaba soñando que me chupaban la polla, pero no era un sueño ahí estaba Roswitha chupando mientras tenía sus dedos dentro de su coño… como me gusta follar, fóllame de atrás, me puse de pié acercando sus caderas al borde de la cama y penetré su coño empapado, estaba tan lubricada que casi no sentía el roce, al instante se corrió nuevamente mojando la cama y la alfombra, me seguí moviendo mientras que le introducía lentamente un dedo en el culo.
-Por que os gusta a vosotros los españoles follar por el culo, no me gusta, me duele.
-Concéntrate solo en tu placer, acaríciate,
Dejé adentro la punta del dedo hasta que disminuyó la presión de su esfínter interno, y recién comencé a mover, lentamente el dedo para  adelante y atrás; cuando noté que estaba mas receptiva  le puse otro dedo mas, comenzó a mover la pelvis más rápido… hijo de puta… que  placer.. que me das…ostia… lo tengo por triple… le introduje el tercero… métemelo ya, ahora que me voy a correr…le introduje lentamente la polla mientras ella se introducía los dedos… no por favor…no, me corro… métela hasta el fondo muévete por dios… y sus gemidos guturales otra vez se transformaron en un largo grito.

El teléfono… abrí los ojos sin saber donde estaba, Roswitha estaba arriba de mi brazo, retire suavemente su cabeza, y contesté.
-Hola quien es
-Comandante son las tres de la tarde, avisaron que mejoró el tiempo tenemos que volver todos como pasajeros del vuelo hasta Paris. Vamos a llegar para navidad. Otra cosa, no  podemos encontrar a Roswitha, estamos preocupados, hicimos abrir la habitación y no durmió en su cama, pero está su equipaje, no sabemos que hacer. El encargado de vigilancia del hotel quiere hablar con ud. ahí sube va a su habitación…..